martes, 23 de septiembre de 2014

Primavera

Hoy te perdono porque es 
primavera.

Como ocurre con todas las cosas 
en la naturaleza,
la primavera perdona al invierno
a pesar de su desgracia y su tristeza,
sin importar quien tuvo la culpa: 
si fue el sol, la vegetación, la lluvia o 
el medio ambiente.

La primavera se olvida de eso, 
ella cambia y la alegría se apodera de todo.
Lo pasado fue dejado a un lado 
y no se arrepiente, 
no hay tiempo para más, 
el cambio es inevitable,
comienza una nueva etapa.

Hoy te perdono porque es primavera.
Mañana no sé, 
posiblemente sea mucho mejor,
como el verano,
porque después de hacer las paces viene la armonía.
O podrá ser peor, 
como el otoño o el invierno,
pero para ese entonces yo ya no estaré.
Seré como los antiguos hombres, 
los nómadas, 
que eran muy sabios, 
que no caminaban por caminar
ni vivían por vivir,
sino que siempre se movían 
porque estaban en búsqueda de la eterna primavera.

Eyan